Es la evaluación de la composición corporal, en la misma, se fracciona al cuerpo en 5 tejidos (masa adiposa, muscular, residual, ósea y cutánea) y se analiza cada uno de ellos por separado.
Los trastornos alimentarios se caracterizan por alteraciones graves de la conducta alimentaria. Existen trastornos específicos como:
La persona con este trastorno rechaza mantener un peso corporal mínimo y desea estar en un peso extremadamente bajo para su edad, altura o constitución física. Tienen mucho miedo a ganar peso y una visión distorsionada de la forma o tamaño de su propio cuerpo.
Generalmente para perder peso, se empiezan excluyendo alimentos altamente calóricos de la dieta, a medida que va avanzando la enfermedad, se va restringiendo cada vez más la dieta, hasta quedar limitada a una pequeña cantidad de alimentos. Otras maneras utilizadas para perder peso, son la provocación del vómito o el uso de laxantes o diuréticos.
Debido a la pérdida de peso, se producen diferentes alteraciones en el funcionamiento normal del organismo. En las mujeres una de las más comunes es la alteración del ciclo menstrual, las mujeres que ya tienen la menstruación pueden dejar de tenerla, y aquellas que aún no la han tenido retrasarse la primera menstruación.
La persona con este trastorno al igual que en el caso de la anorexia nerviosa tienen una preocupación excesiva por la forma o tamaño corporal.
Se diferencia del la anorexia nerviosa, por la presencia de atracones recurrentes seguido de conductas compensatorias para evitar ganar peso.
Para el diagnóstico de este trastorno, los atracones y las conductas compensatorias, tienen que suceder de promedio, unas dos veces por semana durante por lo menos tres meses.
Una vez producido el atracón, la persona mantiene conductas compensatorias inapropiadas, para evitar ganar peso, como son el uso de: vómitos, laxantes, diuréticos, fármacos adelgazantes, ejercicio físico excesivo o ayuno.
El tratamiento es con un equipo multidisciplinario formado por un médico, psicólogo, nutricionista y psiquiatra si es necesario.
El trabajo interdisciplinario permite que el abordaje pueda tener diferentes modalidades, según cada caso.